miércoles, junio 18, 2025

10 PREGUNTAS a Juan Bauty - Versión escrita (11/6/25)

Juan Bauty es uno de esos autores que no se conforman con una sola forma de contar historias. Lo conocimos por su capacidad para narrar lo oscuro desde la aventura adolescente en su trilogía Paranoid Kids. Pero también a través de sus relatos en Creepy Tales 1 y 2. Bauty no solo escribe: también dibuja, enseña, se abre a sus lectores y nuevos escritores en su canal de YouTube y conecta con otros creadores desde las redes sociales. En esta conversación, trataremos de acercarnos a su persona y conocerlo un poquito más a fondo.

Juan, hoy venimos a hablar de libros entre otras muchas cosas. Pero centrándonos en lo literario: ¿Qué es para ti la escritura?

Lo primero, muchas gracias por concederme este espacio y por este ratito de charla contigo, Leo.

Sobre qué es la escritura para mí, diría que es la forma de expresión en la que mejor consigo expulsar ciertos “demonios” interiores, aunque también, como observador que soy del mundo que me rodea, es la manera en la que puedo hablar de ello, siempre bajo un prisma o disfraz de aventura fantástica, combinando lo lúdico con el mensaje, sin llegar nunca al sermón. Al final, por muchos demonios que expíe con mis libros, y por mucha crítica social que haya en el subtexto de lo que escribo, lo que prima es mi afán por entretener al lector.

¿Qué tipo de libros son los que más disfruta Juan Bauty como lector?

Leo todo tipo de géneros y subgéneros, aunque no niego que todo lo relativo al terror, a lo fantástico y al misterio me genera unas cosquillas especiales.

Al margen de géneros, me gusta leer cosas que se salgan del estilo “bestseller” imperante ahora mismo. Me puede gustar lo comercial, pero no el “fast-food” literario, me gusta que tenga cierto contenido, cierto transfondo, En general, suelo leer o novelas de género de hace bastantes años que todavía tengo pendientes, o releer obras favoritas, o apostar por autores autopublicados actuales. Me encanta descubrir nuevas voces dentro de los géneros que frecuento.

¿Cuál fue el momento exacto en el que sentiste que la aventura de los Paranoid Kids acabaría con Fuerzas Ocultas?

Desde el mismo momento en que comencé a tomar notas para el primer libro (allá por 2018), tenía claro que, si las ventas del primero acompañaban, serían tres libros. Eso no impide que me anime a explorar ese ‘universo’ en el futuro, pero esta historia estaba planteada en tres partes y he querido ser fiel a esa idea y no traicionarla, por mucho que me tentara hacerlo.

¿Has conservado el final que tenías pensado desde el primer momento o ha sufrido algunos cambios?

El final es el mismo que tenía en mi mente (y en mis apuntes) desde siempre. Lo que sí me he permitido es cierta libertad (tampoco mucha, pues soy muy cuadriculado) en cuanto a los rodeos que he dado para llegar a él. Ahora solo queda esperar que mis lectores reciban este “cierre” como algo satisfactorio y coherente. Cuando escribes lo que te nace de dentro y, a la vez, quieres satisfacer al lector, cuesta encontrar ese equilibrio. Espero haberlo logrado.

¿Qué has aprendido sobre ti mismo mientras escribías la historia de los Paranoid Kids?

En lo personal, hago mío el ciclo vital del chaval protagonista, Iván. Él va superando la mayoría de sus miedos a medida que avanzan los libros. Yo he sufrido la misma evolución desde que comencé a escribir esta historia y me he despojado de muchos miedos y complejos que tenía. En el caso de Iván, como niño que pasa a adolescente y después a preadulto, y en mi caso, como adulto supuestamente funcional. Siempre quedan miedos por superar y cosas por aprender, pero siento que estoy en el camino. En lo literario, creo que me ha ayudado a ver que puedo defenderme en este terreno y que merezco ser tomado en serio como escritor. En suma, mi autoestima ha mejorado mucho tras escribir esta historia.

En esta trilogía se muestran muchos temores de adolescencia, ¿cuál podría decirse que comparte Juan Bauty con sus jóvenes protagonistas?

En su época compartí todos ellos. Por eso describo con tanto detalle los miedos típicos de esa edad (miedo al fracaso escolar, miedo a no ser aceptado socialmente, miedo a decepcionar a los padres…) o los mismos más irracionales (miedo a la oscuridad, miedo a lo sobrenatural, miedo a lo que escapa de nuestro control…).

Quiero pensar que ya no arrastro esos miedos juveniles, ahora me asolan miedos propios de mi edad, supongo, como es perder el trabajo, envejecer mal, perder salud, perder seres queridos… Los miedos que tenía de joven, como era el miedo a exponerme en público, o el miedo a no ser aceptado por los demás, he ido perdiéndolos con la edad, gracias a la cierta claridad de mente que da la madurez.

Silencio, música ambiente, ruido… ¿Cómo te sientes más cómodo escribiendo?

Suelo optar lo la soledad y el silencio para poder encontrar la concentración deseada.

Una vez logrado esto, me gusta escuchar bandas sonoras de películas y series para escribir, sobre todo a la hora de escribir escenas donde quiero imprimir el “tono” exacto de lo que quiero. Si es una escena de mucho suspense y terror, me pongo música de películas de ese género; si es una escena de acción y aventura, pues lo mismo; si es una escena emotiva, pues acudo a esos temas que me hacen llorar.




¿Qué importancia tiene el silencio en tus obras?

La verdad es que nunca había pensado en ello. Por poder responderte, en mis libros hay momentos reflexivos de los personajes, donde se preguntan a sí mismos sobre esas cuestiones que les preocupan o inquietan, pero imagino que esto es común a la gran mayoría de libros de otros autores. Quizás algunos de mis personajes sobrepiensen demasiado antes de tomar decisiones, y esa es, tal vez, consecuencia de que yo soy así; tiendo a buscar la soledad, el silencio y la introspección para poder poner en orden mi vida.

Tienes un canal de Youtube, que yo insto a quienes nos escuchan a seguir. ¿Cuál es el consejo de escritura que más veces has dado a potenciales escritores, pero que más te cuesta aplicarte?

Consejos de escritura como tal no suelo dar, porque no me considero una autoridad o eminencia en ese sentido. Sí me gusta aconsejar sobre cómo afrontar el medio de la autopublicación de manera profesional, dando mi punto de vista —como persona que conoce todos los entresijos del mundo editorial, pues procedo de él— sobre cuestiones que pueden ayudar al escritor a dar a conocer su trabajo en redes y a mejorar aquellas cosas que puedan ser mejorables.

El consejo que más veces doy y que más me cuesta aplicarme es el de perder el miedo a la opinión de los demás. Quieras que no, a todos nos influye, en mayor o menos medida, la percepción que los demás tienen de nosotros. Otro consejo que me cuesta aplicarme (aunque lucho a diario por recordármelo), es el de no procrastinar en cosas que no me suman (como es entrar al trapo en temas polémicos en redes), pero creo que voy logrando superarlos.

¿En qué momento sentiste que tu canal de YouTube se convirtió en algo más que un experimento?

Aunque todavía no creo contenido con la asiduidad y volumen que desearía, he comenzado a ver mi canal como algo más que un hobby ocasional a raíz de ver a otros creadores creciendo en esa plataforma. También vi que dedicaba mucho tiempo en asesorar a otros autores por mensaje privado, y consideré que era mejor invertir ese tiempo en dar esos mismos consejos en Youtube, de manera pública, para poder llegar así a más personas. Si lo logro, también podré ayudarme a mí mismo a crecer y a difundir mi trabajo.

Eres ilustrador y diseñador gráfico y has llevado a cabo las portadas de tus propias obras. ¿Qué parte del proceso de ilustrar te conecta más contigo mismo?

Hay dos momentos en que conecto mucho: uno es cuando voy recopilando en Pinterest otras portadas de libros o carteles de películas que me inspiran y me dan el “tono” exacto de lo que busco, y el otro es cuando ya estoy pintando la ilustración mientras escucho bandas sonoras o canciones favoritas y que concuerdan con la temática de lo que estoy haciendo. Como vengo dibujando desde bien pequeño, esta parte conecta con ese espíritu de manera directa.

¿Cómo influye la inteligencia artificial en tu manera de entender la creatividad hoy?

La verdad es que no influye en absoluto. Sigo haciendo mi trabajo como siempre, combinando lo tradicional con lo digital, pero siempre realizado a mano, y estoy cómodo en ese proceso, no veo que necesite la IA para nada.

Tampoco me preocupa que otros la usen para generar imágenes o textos y agilicen procesos en ciertas cosas. A mí no me gustan las imágenes generadas por IA, porque, al ser meras regurgitaciones de obras ajenas, me resultan carentes de personalidad, pero es solo mi opinión. Sé que mi trabajo hablará por sí mismo y mi público valorará el componente humano de dicho trabajo. Lo que hagan los demás no me quita el sueño.

Una pregunta controvertida… Hablando de IA. IA, sí. IA, no rotundo. IA, sí, pero. O IA, no, porque…

Pues mira, IA sí. Porque como herramienta es muy poderosa e interesante… si se usa bien y de manera ética. Queda mucho por delante, pero confío en que, con el tiempo, esté bien regulada y se use de manera correcta, sin robar el trabajo ajeno, sin usurpar personalidades ajenas ni emplearla para difundir bulos o sembrar odio.

He usado esporádicamente la IA, pero como mero Google “supervitaminado”. Eso sí, cuidándome bien de contrastar después esa información. En cuanto a diseño gráfico para operaciones concretas, como es eliminar un fondo de una imagen con un simple clic, o poder ampliar una imagen por los bordes para hacerla más grande, me parece todo un invento.

¿Te ha ayudado este nuevo viaje de enseñar a escribir a comprender mejor los mecanismos de escritura, y por tanto, escribir mejor?

Bueno, más que enseñar a escribir (me daría pudor afirmar tal cosa, además), lo que hago en mi canal es mostrar cómo aplicar algunas estrategias para llegar a más público, y también me gusta incidir en el tema de la autoestima, algo de lo que yo carecí durante demasiado tiempo. Y en el “Planificador de novela” que publiqué hace un par de años, comparto mi propio sistema de planificación, no tanto para saber escribir, sino para ordenar ideas caóticas de manera eficiente.

Dicho esto, sí creo que lo que más me ha ayudado a escribir mejor es combinar la lectura de obras clásicas y de nuevos autores autopublicados, que hay ahora mismo muchos y muy buenos (tú incluido ;-)).

¿Hay alguna escena de Paranoid Kids que hoy escribirías de otra manera?

Supongo que todas, ya que los escritores somos seres insatisfechos por naturaleza… Pero creo que lo dejaría todo como está, más allá de mejorar alguna expresión poco natural o eliminar redundancias, propias de una primera obra.

¿Cuál de los personajes es tu ojito derecho?

Dejando a un lado al protagonista (por sus numerosos detalles semiautobiográficos), diría que el señor Cabreras me genera una simpatía especial, me esforcé por hacerlo carismático y creo que acabó siendo el mejor personaje adulto de la trilogía.

¿Has sufrido alguna vez el síndrome del impostor?

Siempre digo que yo no sufro ese síndrome, pero es mentira. Me lo repito para poder creérmelo. Todos sufrimos de él, en mayor o menor medida, cada vez que lanzamos un nuevo libro y aguardamos a las primeras reseñas. Quien diga que no le importa no gustar a los lectores o defraudar a sus fans, miente.

¿Y el bloqueo creativo?

Mira, eso sí que no lo he sufrido, al menos de momento. En realidad, me sucede justo lo opuesto, tengo tantísimos proyectos en mente, que a veces me cuesta decantarme por uno.

¿Algún otro proyecto literario a la vista?

Ampliando la anterior respuesta, siempre tengo proyectos a la vista, no sé estarme quieto, je, je, je. Mi plan original siempre ha sido publicar dos novelas al año; hay veces que lo he cumplido, y otras veces no he podido por causas ajenas a mi voluntad (la vida manda). Aún no sé si este año podré cumplir con ello. Para el año que viene sí tengo decididos ya los dos libros que voy a publicar. Uno es un proyecto 100% original (todavía secreto), y el otro es la continuación de Madame Mym.

Y antes de despedirnos, ¿un consejo que le darías al Juan Bauty que empezaba en el mundo de la escritura?

Que no sea vago y que termine los proyectos que empieza. También le diría que nunca haga caso de su saboteador interior, ese que le dice que no es lo suficientemente bueno. No hay crítico más severo con mi trabajo que yo mismo, me temo...

Gracias por acompañarnos hoy, Juan. Ha sido un placer volverte a tener por aquí.

Gracias a ti, Leo. El placer es mutuo. Un abrazo y otro para quienes hayan leído esta entrevista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario