Título: El asesino del canal
Autor: Georges Simenon
Editorial: Tusquets
Año de edición: 1994
ISBN: 84-7223-443-6
Número de páginas: 179
Sinopsis:
Era
hermosa, y le gustaban las joyas, la diversión, el lujo. Sin embargo, una
madrugada la descubren estrangulada sobre un montón de paja en una cuadra de
Dizy, cerca de una esclusa del canal, a la altura de Epernay.
Por ese
mismo canal, no muy lejos de allí, un yate inglés navega a mayor velocidad que
las pesadas gabarras tiradas por caballo. Y Maigret, en una bicicleta prestada,
pedalea pacientemente de esclusa en esclusa: es la mejor manera de observar el
mundo cerrado y silencioso de los que viven en el canal.
¿Cómo
había llegado aquella mujer hasta allí? ¿Cuál era el motivo de tan escabroso
asesinato? En aquel ambiente, el crimen parece inexplicable.
Mi opinión:
Hace
poco menos de una semana, fui a la biblioteca con la intención de hacerme con
alguna obra policiaca que mereciera la pena. De la estantería elegí “El asesino
del canal” (1931), la segunda de las setenta y dos novelas escritas por el
prolífico autor belga Georges Simenon que tienen como protagonista al comisario
Maigret, Un autor que conocía, pero del que no había leído nada hasta la fecha.
La historia que nos cuenta en este libro me ha parecido bastante amena, aunque
he de reconocer que al principio me costó un poco conectar con ella.
La obra
está escrita en tercera persona y protagonizada por el inspector Maigret, el
cual destaca entre el elenco de sólido personajes que nos presenta el autor. Los
diálogos también están articulados con maestría, aunque desde mi punto de vista
la mayor virtud de la obra son las descripciones, tan fascinantes y realistas que
permiten al lector imaginarse estupendamente los escenarios y acompañar en todo
momento a Maigret en su vieja bicicleta prestada, mientras se mueve de arriba
abajo entre las esclusas del canal de Dizy (Francia), para investigar el
asesinato de una joven desconocida lujosamente vestida aparecida en una cuadra cercana.
Del mismo modo que los escenarios, la atmósfera está descrita de una manera tan
precisa que facilita en buena medida al lector sumergirse en el ambiente y en la trama.
Un
thriller que podría merecerles la pena a aquellos que disfruten con las novelas
detectivescas de época (la obra está ambientada en los años 30 del siglo
pasado) no demasiado enrevesadas ni largas.
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