Hoy nos acompaña en Mi experiencia como escritor(a) María Pareja Olcina, doctora en Lengua y Literatura Hispánicas, catedrática, investigadora, escritora y profesora. Autora de títulos que abordan con valentía temas como el ciberacoso, la identidad digital o el consumo de pornografía entre adolescentes, María no se conforma con entretener: quiere remover conciencias y hacer pensar a sus lectores. Su escritura nace del aula y de la vida, y es por lo que conecta tan bien con quienes más necesitan ser escuchados: los jóvenes. Hoy nos acompaña para hablar de libros, docencia, adolescencia, vocación y futuro.
Bienvenida a Mi experiencia como
escritor(a), María.
Eres doctora en Lengua y Literatura
Hispánicas y catedrática de Lengua y Literatura Castellana desde 2021. ¿Cómo ha
influido tu formación académica en tu labor como escritora?
En realidad, siempre ha existido una
continua retroalimentación entre ambas facetas. Me encanta escribir, sí, pero
antes que escritora fui lectora. Y no una lectora cualquiera, sino una
apasionada —clásicos y contemporáneos— que escribieron antes que yo y me
mostraron caminos posibles.
Mi formación académica me ha dado
herramientas para entender la estructura del lenguaje, las voces narrativas, la
profundidad de los géneros… pero sobre todo me ha enseñado a mirar la
literatura como una forma de diálogo entre tiempos, culturas y emociones. Esa
mirada también la llevo al aula, y desde ahí, muchas veces, surgen las
historias que escribo: de observar al alumnado, de escuchar lo que callan, de
leer entre líneas.
Escribir y enseñar están, para mí,
inevitablemente unidos. Cuando escribo pienso en cómo se va a leer en el aula;
cuando enseño, a menudo pienso en lo que podría escribir sobre lo que estoy
viendo.
Has sido profesora en la Universidad
Jaume I de Castellón, y en la actualidad, enseñas en el IES Violant de
Casalduch en Benicàssim. ¿Qué te motivó a enfocarte en la educación secundaria?
Empecé como docente de Secundaria en
2006 y, desde entonces, no he dejado esta etapa educativa. En 2008 obtuve mi
plaza definitiva en Benicàssim. Lo cierto es que me encanta trabajar con
adolescentes: es una etapa de transformación constante, donde la literatura
puede convertirse en un verdadero refugio, un espejo o una herramienta para
cuestionar el mundo.
Ese entusiasmo por la enseñanza me
llevó también a dar clase en la universidad. Empecé a cubrir vacantes como
profesora asociada en 2008, pero con el nacimiento de mis hijas hice una pausa.
Retomé la docencia universitaria en 2019, pero al final decidí priorizar mi
tiempo libre para dedicarlo a la escritura de literatura juvenil, porque es lo
que me hace verdaderamente feliz.
Tu día a día transcurre entre adolescentes. ¿Cómo ha influido esta experiencia en la creación de tus tramas y personajes?
La verdad es que sin mi experiencia
como docente en Secundaria no existirían muchas de las historias que escribo.
Son las conversaciones, los silencios, las inquietudes y hasta las miradas del
alumnado las que, muchas veces, me hacen detenerme y pensar: “esto hay que
contarlo”.
Es cierto que entran otros muchos
factores en juego —mi propia adolescencia, la actualidad, las visitas a
centros, mis hijas…— pero estar en contacto directo con jóvenes me ayuda a
identificar los temas que realmente importan hoy en el aula: lo que se comenta,
lo que se evita, lo que duele. Eso me permite escribir con más conciencia, con
los pies en el suelo y con el deseo de que lo que lean pueda acompañarlos,
hacerles pensar o al menos decirles: “esto también te pasa a ti, y no estás
solo/a”.
Sí, efectivamente formo parte del grupo
de investigación TALIS (https://proyectotalis.com/), al que conocí gracias a
unas conferencias mientras trabajaba como profesora en la Universitat Jaume I
de Castellón. Fue ahí donde descubrí no solo un equipo altamente comprometido
con la investigación y la innovación educativa, sino también una calidad humana
excepcional en todas las personas que lo integran.
El grupo TALIS trabaja para promover la
innovación y la investigación con el fin de mejorar la educación literaria y
lingüística, así como la educación para el desarrollo sostenible, la ciudadanía
global, la interculturalidad y el aprendizaje de lenguas. Lo que más valoro de
formar parte de este equipo es la posibilidad de unir teoría y práctica: poder
publicar artículos científicos, compartir experiencias reales del aula y
traducir todo eso en propuestas metodológicas que acerquen la literatura
juvenil al aula de manera significativa. La investigación académica, en mi
caso, no se queda en los libros: se transforma en materiales concretos, en
dinámicas de aula, en capítulos que nacen del contacto directo con la realidad
para que los docentes encuentren herramientas contrastadas para trabajar estas
lecturas en el aula. En este enlace (https://www.researchgate.net/profile/Maria-Pareja-Olcina?ev=hdr_xprf) podrás encontrar esta investigación
para descargarla de forma gratuita.
Tu novela "Dame un like"
aborda el ciberacoso, un tema controvertido en los centros de educación. ¿Qué
te llevó abordarlo en tu obra?
En 2017 tenía una tutoría en primero de
la ESO donde todos mis estudiantes, salvo uno, tenían ya un móvil. Lo
sorprendente era que muchas de sus familias todavía no habían tenido acceso a
un smartphone, y eso creaba un
desajuste: no entendían las dinámicas que se estaban generando dentro de los
grupos de WhatsApp y redes sociales, ni el alcance emocional que tenían ciertas
conductas digitales.
Hoy esto ha cambiado: tanto el alumnado
como las familias tienen un móvil inteligente. Pero lo que no ha cambiado es la
dificultad que seguimos teniendo como adultos —profesorado y familias— para
entender y gestionar los efectos del ciberacoso. A veces este tipo de violencia
es tan silenciosa, tan invisible, que puede llegar a hacer que una persona
cuestione si merece la pena seguir viviendo.
Sé que es un tema difícil, incluso
tabú, y entiendo que haya docentes o familias que prefieran no tocarlo. Pero
desde mi punto de vista, justamente por eso, es necesario abordarlo. Y el aula
es un lugar privilegiado para hacerlo desde la empatía, la reflexión y la
prevención.
En Dame
un like intento ofrecer una mirada amplia: no solo del acosado, sino
también del acosador, de sus familias y del entorno que permite que esto
ocurra. Porque estoy convencida de que, en estos casos, ambos necesitan ayuda,
y la literatura puede ser un primer paso para abrir los ojos, entender el daño
y buscar salidas.
"Relacionados" explora las relaciones entre adolescentes. ¿Qué experiencias personales y/o profesionales inspiraron esta historia?
Esta obra también nace de una tutoría,
en este caso de 2º de la ESO, donde me sorprendió descubrir que las familias
del grupo estaban atravesando o habían atravesado un proceso de separación o
divorcio. Se notaba el impacto emocional que esas situaciones habían dejado en
el alumnado, y me pareció interesante reflexionar sobre cómo construimos
nuestras primeras relaciones sentimentales a partir de los modelos que nos
transmiten nuestras propias familias.
Relacionados presenta tres
historias distintas, tres adolescentes que intentan amar desde lo que han
vivido: un caso de divorcio conflictivo, en el que el hijo ha sido usado como
moneda de cambio y desarrolla una fuerte dependencia emocional; otro de
abandono, donde el miedo a vincularse hace que se proteja incluso del afecto; y
un entorno de violencia verbal en casa, que puede llevar a normalizar
comportamientos inaceptables en una relación de pareja.
La propuesta de la obra es clara:
observar, reflexionar y detectar esos patrones antes de repetirlos. Es una
invitación a mirarse por dentro, a dedicarse tiempo, a comprenderse y amarse
antes de entregarse a alguien más. Porque siempre es más sano empezar una
relación desde el amor propio. Y el teatro, con su fuerza directa y emocional,
es una herramienta maravillosa para provocar esas preguntas.
Con "Primavera 2020" te
adentras en el thriller juvenil. ¿Qué desafíos te encontrarse mientras te
adentrabas en este género?
Con esta historia quería construir un
relato en el que el lector adolescente acompañara a la protagonista paso a
paso, desvelando con ella lo que realmente está ocurriendo. Aunque la situación
que se plantea parece surrealista en un primer momento, en realidad está
anclada en algo muy real: la primavera de 2020.
Durante ese periodo, los adolescentes
fueron el grupo que más tiempo pasó confinado. Y fue entonces cuando comenzaron
a aflorar procesos de ansiedad que, hasta ese momento, no eran tan visibles en
estas edades. En Primavera 2020, la
protagonista transita entre realidad y ficción, y esa ambigüedad no solo
engancha al lector, sino que también permite al profesorado abrir debates
profundos en el aula: sobre la salud mental, el duelo por una muerte prematura,
el consumo de sustancias y sus consecuencias.
Una de las cosas más gratificantes ha
sido ver cómo esta obra ha llegado más allá de nuestras aulas. Se ha presentado
en el Instituto Cervantes de California y ha sido utilizada en departamentos de
español en Europa como lectura para aprender la lengua desde una perspectiva
emocional y contemporánea. Para mí, ese ha sido el verdadero reto: combinar lo
literario con lo educativo y emocional, y que funcione en distintos contextos
educativos.
En "Por no quererme" y "Porno ham" abordas los efectos del consumo de pornografía entre jóvenes. ¿Cómo surgió la idea de tratar este tema en tus libros?
La idea surgió, como muchas veces
ocurre, dentro del aula. Algunas respuestas, comentarios y situaciones que
observaba en mi alumnado me hicieron empezar a investigar con más profundidad
sobre el consumo de pornografía en adolescentes y sus efectos. Lo que encontré
fue muy alarmante. A medida que me adentraba en el tema, aumentaba mi
preocupación: la facilidad de acceso, la naturalización de contenidos
violentos, la desinformación… todo esto estaba teniendo consecuencias reales en
cómo se construyen las relaciones afectivas y sexuales en la adolescencia.
Y lo más grave: muchas veces ni las
familias ni los propios jóvenes son conscientes del impacto que puede tener
este consumo o de los delitos que pueden cometerse sin saberlo.
Por eso decidí escribir esta obra de
teatro, porque el teatro permite abrir el debate desde un lugar seguro,
colectivo y crítico. Ha sido un libro marcado por la investigación y el
acompañamiento, y tengo que agradecer especialmente a la plataforma Dale una vuelta por su labor
divulgativa, y también a agentes de la Guardia Civil y policías que me ayudaron
a entender la dimensión legal del tema.
La obra está pensada para que cada
escena pueda trabajarse de forma independiente o como una lectura completa,
según el enfoque del aula. Además, incluye una guía para docentes con recursos
y propuestas concretas.
Además, estoy muy ilusionada porque el
próximo curso una compañía teatral va a representar esta obra en centros de la
Comunidad Valenciana y Cataluña que así lo soliciten. Creo que verla
interpretada por actores profesionales puede ser una experiencia muy
transformadora para el alumnado.
¿Tan importante es quererse a uno mismo
para no caer en ciertas tentaciones o adicciones?
Sí, absolutamente. Quererse,
comprenderse, aceptarse… ahí está la base de muchas de nuestras decisiones y
también de nuestras carencias. Cuando una persona desarrolla una adicción —sea
a la pornografía, a una sustancia o a una conducta— no suele hacerlo desde la
plenitud, sino desde un vacío, desde una necesidad no atendida.
¿Cómo podemos abordar el tema del porno
con nuestro hijo adolescente sin resultar invasivo o intimidarles?
Creo que es fundamental hablar con
nuestros hijos e hijas adolescentes sobre cualquier tema, incluida la
sexualidad. Entiendo que puede ser complicado, porque en muchos casos no
quieren tener este tipo de conversaciones con nosotros. Pero eso no significa
que no debamos intentarlo. A veces, simplemente escuchar cómo hablamos del tema
con nuestra pareja o con otras personas de confianza puede abrirles una puerta.
Lo importante es que sepan que estamos disponibles, que pueden acudir a
nosotros sin miedo cuando tengan dudas o necesiten hablar.
Cada vez esas preguntas llegan a edades
más tempranas, y como madres, padres o educadores debemos estar preparados para
responder sin juzgar, desde el respeto y la confianza. Este libro se pensó
también como una herramienta para acompañar esa conversación: puede leerse en
familia, y muchas de sus escenas o materiales —vídeos, dinámicas, preguntas—
están diseñados precisamente para propiciar el diálogo. A veces basta con ver
una escena juntos y preguntar: “¿Tú qué opinas?” o “¿Crees que esto pasa en la
realidad?”. Desde ahí se puede construir mucho. La clave es escuchar más que
corregir, y generar un espacio donde puedan expresar sus dudas y lo que
entienden por una relación sexual. Te dejo por aquí algunas propuestas: https://mariapareja.es/pornoquererme/profes/
Has participado en proyectos educativos nacionales y europeos que apuestan por la innovación educativa. ¿Qué factores destacarías de todos esos encuentros y trabajos para tu crecimiento como persona y profesional?
Sin duda, uno de los proyectos más
enriquecedores ha sido el Erasmus+ De
escritores a docentes (https://mariapareja.es/2023/04/18/erasmus-de-escritores-a-docentes/ ), que llevamos
a cabo desde la Asociación de Escritores de Castellón. Este programa nos
permitió acercar la literatura juvenil —y en concreto nuestras propias obras— a
centros educativos de Portugal, Italia y Francia.
Fue una experiencia muy especial, no
solo por el alumnado con el que trabajamos, sino también por el intercambio tan
humano y profesional con las profesoras de esos países. Ver cómo nuestras
historias conectaban con jóvenes de contextos distintos, y cómo el aula se
convertía en un espacio de diálogo intercultural, fue emocionante.
El proyecto culminó con un campus
literario donde participaron institutos de todos los países involucrados, y
donde no solo estuvo presente la literatura, sino también el deporte, gracias a
la implicación de nuestro centro (https://portal.edu.gva.es/iesbenicassim/es/author/m_parejaolcina/page/3/ ).
Formas parte del grupo de Escritoras
del Arco Mediterráneo. ¿Qué significa para ti pertenecer a esta comunidad?
Para mí, formar parte de la Plataforma
de Escritoras del Arco Mediterráneo ha sido una experiencia fantástica. Siempre
me ha gustado invitar a autoras y escritoras a mi centro para trabajar la
literatura desde una perspectiva más viva y cercana, y fue precisamente a
través de ese interés como conocí este grupo.
Más allá de ser un espacio de encuentro
literario, es una comunidad activa que promueve actividades culturales, impulsa
la creación contemporánea y también se dedica a rescatar del olvido a aquellas
autoras que no fueron reconocidas en su momento. La labor que realizan es
valiosa y necesaria, porque no solo difunden, sino que reivindican.
Me siento muy afortunada de poder
aportar mi granito de arena a esta red de mujeres comprometidas con la
literatura, la memoria y la igualdad.
¿Qué papel consideras que ocupa hoy en
día la mujer en la literatura nacional e internacional?
Creo que la mujer ha ganado visibilidad
en la literatura, pero aún queda mucho camino por recorrer, sobre todo en
cuanto al reconocimiento, la representación equitativa y el espacio que se le
da en los circuitos culturales, editoriales y académicos.
En el panorama nacional e internacional
vemos autoras brillantes que están contando historias necesarias, renovando las
formas de narrar y abordando temas que durante mucho tiempo estuvieron
silenciados. Sin embargo, seguimos viendo cómo muchas veces su trabajo se
etiqueta, se reduce o se limita a ciertos géneros considerados “menores” o
“femeninos”, como si eso fuera un compartimento aparte del canon literario.
Además, todavía hay autoras
fundamentales que no están en los currículos escolares, y es necesario seguir
reivindicando su presencia en las aulas para que nuestras jóvenes lectoras
puedan verse reflejadas en voces que les hablen de tú a tú, y nuestros jóvenes
lectores aprendan a leer también desde esa mirada.
El papel de la mujer en la literatura es, y siempre ha sido, central. Solo que durante mucho tiempo fue invisible. Hoy tenemos la responsabilidad —y también la oportunidad— de seguir rescatando, difundiendo y valorando ese legado, y de apoyar a las nuevas voces que lo están construyendo.
En tu blog y redes sociales compartes reflexiones sobre la educación y
la literatura. ¿Qué papel juegan estas
plataformas en tu labor como educadora y escritora?
La verdad es que para mí han sido una
oportunidad para compartir lo que pienso y lo que hago. Las redes y el blog me
permiten no solo mostrar mi trabajo como escritora y educadora, sino también
generar conversación, intercambiar ideas, buscar inspiración y conectar con
personas —docentes, estudiantes, familias, lectores— que de otro modo sería más
complicado.
Has abordado temas tan complejos como
el ciberacoso y el consumo de pornografía en tus obras. ¿Cómo manejas la
sensibilidad de estos temas al escribir para un público joven?
Con mucho respeto, y sobre todo, con
honestidad. Cuando escribo para jóvenes no pienso en suavizar la realidad, sino
en cómo contarla de forma que puedan comprenderla, reflexionar sobre ella y
sentirse acompañados sin sentirse juzgados.
Estos temas —como el ciberacoso o el
consumo de pornografía— no son fáciles de tratar, ni dentro ni fuera del aula.
Pero justamente por eso creo que es importante que aparezcan en la literatura
juvenil de nuestras aulas y bibliotecas escolares, porque existen en su día a
día y muchas veces no encuentran espacios seguros donde hablar de estos temas.
Además, siempre pienso en el acompañamiento docente o familiar. Por eso, mis libros van acompañados de materiales, guías o actividades que facilitan el diálogo y ayudan a trabajar estos temas de forma progresiva y respetuosa. Porque no se trata solo de remover, sino también de ofrecer herramientas para construir.
¿Qué consejos darías a jóvenes escritores que desean abordar temas sociales en sus obras?
Les diría que no tengan miedo a
incomodar, pero que lo hagan siempre desde el respeto y la reflexión. Escribir
sobre temas sociales implica una gran responsabilidad, pero también una
oportunidad maravillosa de generar conciencia, de dar voz a lo que muchas veces
se silencia y de conectar con quienes están buscando respuestas.
También es importante que crean en su
mirada, aunque sea distinta, aunque todavía esté formándose. Y por último, que
recuerden que cada historia que se cuenta con sinceridad y propósito puede ser
una chispa para el cambio. La literatura no lo soluciona todo, pero puede ser
el inicio de muchas cosas.
¿Cómo ves el papel de la literatura
juvenil en la educación actual?
Creo que la literatura juvenil actual
es una herramienta poderosa y, a veces, infravalorada. No solo puede despertar
el gusto por la lectura, sino que tiene la capacidad de conectar con las
emociones, las dudas y las realidades que viven los jóvenes hoy. Es un puente
entre el aula y la vida.
En una etapa en la que se están
formando la identidad, los valores y las relaciones personales, los libros
pueden ser espejos, ventanas y mapas. La literatura juvenil ayuda a que el
alumnado se reconozca, cuestione el mundo que le rodea y encuentre palabras
para nombrar lo que siente.
Además, bien trabajada, permite abordar
temas complejos como el acoso, la ansiedad, la presión social o la sexualidad
desde un lugar cercano y accesible. Por eso creo que no solo es útil, sino que
es necesaria. Y cuanto más la integremos en el aula con propuestas vivas,
dialogadas y críticas, más contribuiremos a una educación realmente
transformadora.
¿Dónde podemos hacernos con tus obras?
Mis obras están disponibles en
librerías de toda España, así que puedes pedirlas en tu librería habitual y
apoyar así al comercio local. También puedes adquirirlas directamente desde la
editorial a través de la web (https://sansyediciones.es/tienda/ ), o encontrarlas en plataformas
online como Amazon. Si eres docente o coordinas un grupo de lectura, puedes
solicitar ejemplares con descuento enviando un correo a info@sansyediciones.es,
y si quieres trabajar las lecturas en el aula, tienes la opción de solicitar
muestras gratuitas en este enlace: https://sansyediciones.es/contacto-muestras/. Todo pensado para que la literatura
llegue al aula con la mayor facilidad posible.
¿Qué proyectos futuros tienes en mente,
tanto en el ámbito literario como educativo?
En el ámbito literario, estoy
especialmente ilusionada con un nuevo proyecto que verá la luz el próximo
curso. Se trata de una obra muy personal y necesaria que lleva por título TDAH, aunque en este caso hemos
resignificado las siglas como Tenaz,
Decidida, Apasionada y Humana. El objetivo es ofrecer una mirada cercana,
empática y realista sobre esta divergencia neurológica —especialmente en su
subtipo inatento— a través de la vivencia de Eva en todas las etapas de su
vida.
Esta obra ha sido revisada y apoyada
por psicólogas, investigadoras y asociaciones especializadas, para que su
contenido sea lo más riguroso y al mismo tiempo accesible posible. Además, irá
acompañada de una guía para docentes y otra para el alumnado, de forma que
pueda trabajarse dentro del aula y favorecer la comprensión de esta
característica neurológica.
En el ámbito educativo, uno de los
proyectos que más alegría me ha dado este curso es el nacimiento de nuestro
podcast literario escolar. Lo han creado desde cero mis estudiantes, y a través
de él hemos conseguido acercarnos tanto a los clásicos de la literatura como a
autores actuales desde una perspectiva muy cercana. Mi intención es
consolidarlo y seguir dándole espacio como herramienta educativa y creativa.
Puedes escucharlo aquí: Podcast escolar – YouTube.
Otro de los proyectos con los que me
siento especialmente orgullosa es el estreno de un cortometraje educativo que
realizamos a lo largo del curso, donde el alumnado adaptó una obra literaria al
lenguaje cinematográfico. Lo más enriquecedor fue poder contar con la
colaboración de profesionales del mundo del cine afincados en Benicàssim,
quienes se implicaron activamente, ofreciendo talleres, asesoramiento técnico y
orientación para que el proceso fuera lo más profesional posible.
El resultado fue una experiencia
transformadora tanto a nivel creativo como educativo. Os dejo el enlace al
proyecto porque realmente merece la pena conocerlo: Cine y literatura – María Pareja. Además, la revista Educación 3.0 se
hizo eco de la iniciativa, destacándola como una experiencia innovadora y dando
las claves para que otros docentes puedan implementarla también en sus aulas: El Quijote audiovisual – Educación 3.0
Como ves todos nacen del aula, de las
inquietudes reales del alumnado, y de mi compromiso por seguir acercando la
literatura a sus vidas de forma significativa.
¿Dónde podemos seguir tu trabajo?
¿Tienes redes sociales?
Mi trabajo como escritora y docente
está recopilado en mi página web: www.mariapareja.es, donde vais a encontrar materiales
descargables para trabajar cada uno de mis libros, tanto en el aula como en
casa: guías de lectura, situaciones de aprendizaje, rúbricas, actividades
interactivas, vídeos, podcast y experiencias de otros centros. También podéis
seguirme en redes sociales, donde comparto novedades, recursos gratuitos y
experiencias de clase:
● Instagram: @mariaparejaolcina
● X: @MaraPareja7
● TikTok: @mariaparejaolcina
● Facebook y LinkedIn: María Pareja
Olcina
● ResearchGate: María Pareja Olcina
Gracias, María, por abrirnos las
puertas de tu mundo con tanta generosidad. Tu mirada, siempre atenta y
reflexiva, nos recuerda que la literatura juvenil no es un género menor, sino
una herramienta poderosa de transformación. En un tiempo en el que los adolescentes
buscan referentes y espacios de escucha, tu labor como escritora y docente es
más necesaria que nunca.
Muchísimas gracias, Leo, por este espacio y por la labor tan generosa que haces al dar voz y visibilidad a otros escritores. Me ha impresionado la rapidez, el cuidado y la efectividad con la que trabajas.
Te estoy muy agradecida por el cariño con el
que has preparado esta entrevista, y te deseo lo mejor en todos tus proyectos.
¡Ha sido un placer!
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