jueves, marzo 23, 2023

10 PREGUNTAS a Jesús Gordillo

Hoy tenemos en “Mi experiencia como escritor” a Jesús Gordillo,

Escritor de literatura de género, y músico de blues que nunca termina de retirarse del todo.

Hola, Jesús. Un honor tenerte hoy en nuestro espacio.

El honor es todo mío. Me gusta cualquier sitio que huela tanto a cultura. Gracias por invitarme a pasar por aquí.

Vamos con la primera pregunta. ¿Quién es Jesús Gordillo?

Jesús Gordillo, ahora, en este preciso momento, es un señor que empieza a sentirse viejo. Un hombre que se ha saltado los pasos de señor adulto que le correspondían, y que se ha quedado anclado en una juventud que está un tanto caduca. Un tipo que cada vez entiende menos el mundo que le rodea, y que por eso se esconde siempre en sus historias ficticias. Alguien que escribe ficción incluso cuando no toca una tecla.

¿Desde cuándo escribes?

Canciones, desde la adolescencia. Con la prosa empecé muy tarde, cuando conseguí trabajo de oficina y tuve las tardes libres. Cerca de la treintena.

¿Qué recuerdos tienes de esos primeros textos?

Mucha pasión y poca técnica. Las historias se agolpaban en mi cabeza, pero no tenía aún las herramientas narrativas para que funcionasen en condiciones. Eran relatos cortos que convencían a los lectores casuales, pero yo sabía que esas historias no estaban listas para ser publicadas. Eran como un torbellino de prosa pulp y ficción extrema, pero sin preparación en las escenas, ni profundidad en los personajes.  

Aunque confieso que ahora, después de los años, añoro a ese cabrón inconsciente que lanzaba letras como si fuera una ametralladora.

Tus relatos han aparecido en numerosas antologías. ¿Qué consideras que debe tener un buen cuento para llegar al lector?

No tengo ni la menor idea, pero yo siempre apuesto por dos cosas: ambiente y ritmo. Haz viajar al lector al interior de las páginas, y se quedará un rato a ver lo que sucede.

Con las novelas es diferente. En ellas, apuesto por personajes bien creados, y diálogos creíbles.

En 2013 publicaste junto Javier Martos “Ojos de circo”, ¿cómo es la experiencia de escribir a cuatro manos?

Atroz y maravilloso. Hay día en que lo odias, y otros en que te encanta. Si encuentras la sinergia, y con Javi la he encontrado de sobra, el resultado puede ser buenísimo, pero el proceso requiere de una confianza ciega en tu compañero. Total libertad a la hora de opinar y nada de ofensas. No apto para gente sensible.

Precisamente ahora, en estos días, acabo de terminar mi tercera novela a cuatro manos con Javi Martos, que esperamos que pueda publicarse a finales de este año. No puedo adelantar mucho más, pero el proceso está bastante avanzado.

En 2014, sacaste al mercado tu primera novela en solitario. Su título: “Mustang”. ¿Cómo se cuece esta historia en tu cabeza?

Esa historia la escribió el Jesús Gordillo novato y arrogante, que estaba lleno de ideas, pero falto de experiencia. Mucho ritmo, balas y testosterona, pero con personajes estereotipados y carentes de profundidad. Un libro en el que volqué toda mi pasión por Tarantino o Scorsese. Algo que nunca debió publicarse, pero que, por algún extraño motivo, convenció a una editorial para que apostase por sus páginas. No estoy especialmente orgulloso de ella, pero supongo que es una parte necesaria del proceso.

Tu segunda novela se titula “Los agujeros de las termitas” (2016). Como en el caso de “Mustang”, la historia se desarrolla en el contexto de la Guerra Civil Española. ¿Cómo es el proceso de documentación que llevas a cabo?

La documentación es la mejor parte de todo esto. Lo hago leyendo y viajando, que es a lo que destino todo lo que gano como oficinista. También me gusta reunirme con gente que se presta a ayudarme a construir los personajes.

En el caso de Los agujeros de las termitas, por ejemplo, tuve la ocasión de entrevistarme con un inmigrante ilegal que había entrado en España en patera. Estuve horas con él y quedé seducido por su autenticidad. El resultado fue la creación de uno de los protagonistas, Zuno, que acabó cogiendo vida propia mientras escribía el libro.

Tras “En el lago” (2017, junto a Javier Martos) y “Dioses, fantasmas o demonios” (2018), presentaste al público “Réptil” (2021). ¿Qué nos cuentas en ella?

Reptil es mi caballo estrella. Un personaje con tanto carisma que fue el único que escribió el Jesús Gordillo novato de antes de Ojos de Circo, y que rescaté muchos años después para reescribir la historia con la técnica que merecía. Se fraguó en las tripas de un foro de literatura, en forma de entradas semanales para unos pocos lectores que me seguían, y la convertí en novela durante el confinamiento. Tengo libros que son mejores que ese, pero ninguno es tan jodidamente magnético.

Recientemente, en diciembre de 2022 publicas tu séptima y última novela. Su título: “La memoria del metal”. ¿Podría decirse que es tu mejor trabajo hasta la fecha?

No sé si la mejor, pero sí la más sólida y compleja que he escrito hasta la fecha. A nivel de construcción personajes, estructura temporal, y documentación, fue agotadora. Tuve que buscar en la física, la filosofía y en psicología para que fuera redonda. Fue la primera vez que intenté hacer algo diferente, y confío en no haberme perdido por el camino. De momento, las primeras reseñan están siendo muy favorables.

Mirando un poco hacia dentro, ¿cómo dirías que ha sido tu evolución desde que presentaste tu primera obra publicada hasta la última?

He ganado mucha técnica y concepción real de la obra, pero ciertamente he perdido pasión y ritmo a la hora de crear historias. Me considero ahora mucho mejor escritor, pero echo de menos escribir con inconsciencia.

¿Tienes algún proyecto literario futuro del que puedas hablarnos?

Sin entrar en demasiado detalle, puedo decir que Reptil 2 ya existe dentro de algún buzón editorial, y que he cerrado uno círculo de escritura a cuatro manos con mi tercera novela junto a Javier Martos. Dentro de mi cabeza, además, flota la idea de buscar un ilustrador con quien iniciar algún proyecto conjunto.

Antes de despedirnos, me gustaría que nos dejases algún consejo que creas que pueda servirle a quienes empiezan en la escritura.

Escritor novato, busca a un lector de auténtica confianza (sincero y bien intencionado), pásale tu manuscrito y créele cuando te diga que es una auténtica mierda. Porque seguramente lo sea. Porque siempre lo es cuando estás empezando. Escúchale, mastica la punzada del pecho, y trata de corregir las partes en las que has fracasado. Si consigues hacer eso, tendrás la mitad del camino recorrido para ser un escritor. 

Muchas gracias, Jesús por este ratito. Un placer haber podido contar contigo entre nosotros.

Gracias a vosotros por difundir la cultura en estos tiempos terribles para el arte. Un abrazo fuerte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario